Santa Margarita María Alacoque, VSM
"Arrojaos con gran confianza en los brazos de Jesús; el amor se los hizo extender en la cruz para recibir a sus hijos que vuelven a él."
Iniciamos un año más de apostolado y en este mes dedicado a Santa Margarita María Alacoque, quiero compartir contigo, querido Hermano Guardia de Honor, una serie de meditaciones sobre el Sagrado Corazón, queriendo así complacer a nuestra querida Maestra en la Ciencia Divina del Amor.
En efecto, Santa Margarita María decía a sus Novicias que, si querían hacer algo para agradarle, deberían honrar con todas sus fuerzas y volcar todo su amor en el Sagrado Corazón de Jesús.
Por ahora te dejo con una experiencia de esta Visitandina sobre un santo muy querido por la Iglesia Universal: Francisco de Asís, Protector de la Guardia de Honor.
Aprendamos la devoción a tan grande contemplativo del Corazón de Cristo, pidiendo su intercesión en nuestro tarea diaria de dar Gloria, Amor y Reparación al Amor de nuestras almas.
"Un día de San Francisco, durante mi oración, Nuestro Señor me hizo ver a este gran Santo revestido de luz y esplendor incomparables y elevado a un altísimo grado de gloria, por encima de otros santos a causa de la conformidad que tuvo a la vida paciente de Nuestro Divino Salvador, su interés por la vida de nuestras almas y el amor de nuestros corazones; además del amor que tuvo a su Sagrada Pasión, que había atraído al Divino Amante crucificado a imprimir en él sus Llagas Sagradas, constituyéndolo uno de los más amados de su Sagrado Corazón, dándole gran poder para obtener la aplicación de los méritos de su Sangre preciosa y distribuir este divino tesoro.
Le dio además, poder de aplacar la divina justicia irritada con los pecadores, exponiéndose a la divina cólera de un Dios irritado como su Hijo crucificado, por amor de Aquel ante quien cede la rigurosa Justicia a la dulce y amorosa Misericordia.
Después de haberme hecho ver todas estas cosas, el Divino Esposo de mi alma me lo dio por conductor y guía.
Sor Margarita María Alacoque, VSM.
