PRENDAS DE SALVACIÓN, SON LAS LLAGAS DEL SEÑOR

POR SUS LLAGAS GLORIOSAS HEMOS SIDO CURADOS

DESCUBRIENDO A MARÍA MARTA CHAMBON, VSM.

DIOS SE DA A LA VISITACIÓN

El 2 de octubre de 1867, Sor Marie-Marthe asistía a una toma de hábito, cuando se abrió la bóveda de los cielos, vio allí la misma ceremonia en un esplendor muy diferente  al de la tierra.

Toda la Visitación del Cielo estaba presente: las primeras Madres volviéndose hacia ella, como para anunciarle buenas nuevas, le dijeron alegremente:

El Padre Eterno ha dado a nuestra Santa Orden a su Hijo de tres maneras:

1 Jesucristo, su cruz y sus heridas a esta casa en particular.

2 Jesús y su Sagrado Corazón.

3 El Niño Jesús. Deben tener todas la simplicidad del niño en sus relaciones con él.

Este triple regalo no es nuevo. Volviendo a los orígenes del Instituto, nos encontramos en la vida de nuestra Madre Anne-Margarita contemporánea de Santa Juana de Chantal, estas tres devociones, que todas las monjas formadas por ella llevaban este sello.

Unos días más tarde, la madre Marie-Pauline Deglapigny, muerta hacía dieciocho meses, aparece a su hija y la confirma sobre el regalo de las Santas Llagas: La Visitación ya tiene una gran riqueza, pero no es completa. Es por eso que estoy feliz, el día que dejé la tierra, en lugar de tener solo el Sagrado Corazón de Nuestro Señor, tuve toda la humanidad santa, es decir, su Heridas Sagradas... Y pedí esta gracia para ti. 

Motivos para la devoción a las Llagas de Jesucristo.

 Nuestro Señor, dirigiéndose a su Sierva la dice:

"Las heridas de mis pies sagrados son un océano. Tráeme aquí todas mis criaturas; estas aberturas son lo suficientemente grandes como para alojarlos a todos."